Círculo vicioso versus virtuoso
Como
educadores, ya debemos conocer los mecanismos básicos de aprendizaje y el
efecto de las leyes de la motivación y el refuerzo en los mismos.
¿Seremos capaces de romper la espiral de un círculo vicioso para
convertirlo en virtuoso?
Esta es la diferencia:
Círculo
vicioso: A partir de la frustración que
produce un fracaso se genera miedo a ese tipo de actividad, lo que conlleva su
evitación. La ausencia de práctica impide los aprendizajes, lo que conduce a
una menor competencia y peor rendimiento que aumenta los refuerzos negativos,
traduciéndose en emociones displacenteras y por tanto motivación negativa capaz
de impulsar de nuevo el giro del círculo en el sentido contrario.
Círculo
virtuoso: La satisfacción que
produce la resolución exitosa de una tarea aumenta el deseo de continuar con la
misma, lo que promueve mayores y mejores aprendizajes, que conllevan mayor
competencia y rendimiento, lo que a su vez conduce a un aumento de
gratificaciones y recompensas, cerrando el círculo en la dirección positiva y
adecuada.
Si
facilitamos experiencias de éxito, que reforzamos adecuadamente podremos
generar un círculo positivo, incluso podemos romper una espiral negativa con
aproximaciones sucesivas a un aprendizaje sin que genere frustración o fracaso.
Y ¿por qué no? Podemos aplicar esto mismo a nuestra propia vida personal,
profesional y social.
No hay comentarios:
Publicar un comentario